La confianza del consumidor rompió un récord histórico, al alcanzar su mayor nivel desde que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) tiene registros (2001), al reportar un incremento mensual de 5.94 puntos durante febrero, lo que ubicó al respectivo índice en los 119.88 puntos.
La cifra reportada por el instituto este martes superó ampliamente al pronóstico esperado por el consenso de analistas consultados por Bloomberg, que anticipaban que se ubicaría en los 111 puntos.
Mexicanos dan ‘voto de confianza’ al futuro económico del país
El ascenso ‘meteórico’ que se ha observado en la confianza del consumidor se remonta a julio del 2018, fecha en la que aconteció la jornada electoral para elegir presidente de México por los próximos seis años.
En tan solo ocho meses, los consumidores mexicanos incrementaron su confianza en 17 por ciento y una gran parte de este aumento se debe a su optimismo económico en el país.
Para Juan Carlos Alderete, economista senior de Grupo Financiero Banorte, durante los próximos meses la confianza del consumidor permanecerá elevada.
«No obstante, en el muy corto plazo no podemos descartar un ligero retroceso ante el impacto de los recientes choques transitorios y señales de una desaceleración global y local«, puntualizó el especialista.
De acuerdo con el órgano estadístico, el mayor ‘espaldarazo’ de confianza se puede observar al momento de preguntarle a los mexicanos sobre la condición económica que tendrá el país dentro del próximo año, ya que en febrero, el optimismo creció 4.1 por ciento respecto a enero, lo que ubicó a su respectivo índice en su mayor nivel desde abril de 2001 con 133.98 puntos.
El panorama actual también ‘pinta’ más optimista, ya que al preguntarle a los encuestados, ¿cómo considera usted la situación económica del país hoy en día comparada con la de hace un año?, los niveles de confianza ascendieron en 11.6 por ciento respecto a enero, lo que estableció al índice en los 121.05 puntos.
Confianza del hogar es más ‘cautelosa’
La confianza de los hogares también han ido en ascenso, aunque de una forma más moderada.
La percepción de confianza en la situación económica actual de los hogares mexicanos se incrementó en 2.4 por ciento respecto a enero, mientras al tratar de visualizar como ven las familias su situación económica para el próximo año, se observó una expansión de optimismo de 2.5 por ciento a tasa mensual.
Ante las posibilidades adquirir bienes duraderos como electrodomésticos, televisiones, estufas, licuadoras, entre otros tipos de aparatos, el panorama también luce alentador, ya que tan solo en febrero, la confianza para adquirir este tipo de bienes aumentó 9.1 por ciento, por lo que de acuerdo con el Inegi, no se había alcanzado este grado de optimismo desde marzo de 2006.
*Este artículo aparece primero en El Financiero Bloomberg.